Grandes operadores retiraron una parte de los fondos especulativos invertidos en Letras del BC
No se renovaron todas las Lebac
El 15 por ciento de los papeles de deuda de cortísimo plazo emitidos por el Banco Central quedaron liberados. El dólar cerró en 17,37 pesos. En la city adelantan una recuperación de la cotización en los próximos días. Caída de las reservas internacionales.
El Banco Central no pudo renovar cerca de 82 mil millones de pesos en el megavencimiento de Lebac. La autoridad monetaria se enfrentó ayer a la misión de renovar esos títulos de cortísimo plazo por 535 mil millones de pesos y sólo consiguió adjudicar 453 mil millones. Esos pesos, más los 8000 millones de pesos en intereses, que quedaron dando vueltas en el mercado podrían volver a generar tensiones en la plaza del dólar. Entre los operadores de billetes verdes consideran que un tipo de cambio a 17,37 es una nueva oportunidad de comprar barato. En el Central aseguran que no hay preocupación. Apuestan a que parte de los pesos que quedaron sin renovarse en la licitación primaria de Lebac volverán a ser absorbidos en el mercado secundario de esos papeles de deuda o se destinarán a instrumentos de pases.
En la autoridad monetaria mencionaron a este diario que una parte importante de los pesos que ayer no se renovaron son de inversores institucionales (bancos). Las entidades deberán mostrar requerimientos de encajes y por lo tanto necesitan recuperar liquidez para poder hacer los depósitos correspondientes en las cuentas del Banco Central. Unos 15 mil millones de pesos que no se renovaron además fueron de la Anses, que por un cambio en la estrategia de su cartera de inversiones prefirió salir de Lebac y pasarse a operaciones de pases con el BC, lo que ofrece una mayor liquidez de corto plazo. En el organismo previsional se están entregando cerca de 600 millones de pesos por días en préstamos y para abastecer esos préstamos necesita tener una mayor disponibilidad.
El clima de tensión que atravesó las últimas semanas el organismo a cargo de Federico Sturzenegger se descomprimió tras el resultado de las elecciones. La fuerte demanda de divisas que había obligado al Central a vender 1800 millones de dólares de las reservas en menos de diez días entró en una impasse. Pero eso no implica que la entidad pueda relajarse, puesto que le quedan resolver varios frentes conflictivos.
El primero es que la tasa de interés sigue elevada y tiene cada vez menos margen para hacerlo. En la licitación de letras de ayer la tasa de Lebac se mantuvo en 26,50 por ciento, lo que implica que seguirá pagando unos 641 millones de pesos por día en intereses de esta deuda. En las agencias de bolsa señalan que sin haber movido el rendimiento, hubo 90 mil millones de pesos que el mercado decidió retirar de inversiones en Lebac y que si el organismo hubiera intentando bajar la tasa la cifra podría haber superado los 100 mil millones de pesos.
El segundo elemento de tensión es el proceso inflacionario. Los precios subieron, según el promedio de las consultoras privadas, un 2,1 por ciento en julio y se esperan subas con un piso de 2 por ciento para agosto. La incertidumbre con el tipo de cambio a partir de junio no fue el único factor que provocó el rebote inflacionario. El aumento de los combustibles y servicios como las prepagas fueron otros focos de presión. La falta de certidumbre sobre la evolución de variables macroeconómicas claves es otro punto que incentiva las remarcaciones de los empresarios. El Central informó y ratificó que a fin de año iba a mostrarle una inflación del 17 por ciento, pero en los primeros siete meses del año ya se acumuló una suba del 14 por ciento y si este mes los precios siguen subiendo como en la primera semana ya se alcanzaría la meta anual.
La caída de las reservas internacionales es un tercer foco de problemas para el Central. El pico en abril fue de 52 mil millones de dólares y desde ese momento registró una caída de casi 4000 millones de dólares. Ayer cerró en 47.740 millones (ver aparte).
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